Acompañar a las personas que atraviesan el dolor de la pérdida es una de las áreas más delicadas y profundas de la psicología. Mi enfoque se centra en ayudar a los pacientes a procesar su dolor de manera saludable, promoviendo la aceptación y la resiliencia. Este acompañamiento es personalizado, ya que cada persona vive el duelo de manera única.
A través de enfoques terapéuticos como la terapia cognitivo-conductual, la terapia de aceptación y compromiso o el enfoque humanista, te brindo herramientas para gestionar el dolor emocional, identificar bloqueos en el proceso de duelo y fomentar la adaptación a una nueva realidad sin la presencia de aquello que se ha perdido. El acompañamiento es clave para prevenir complicaciones como el duelo prolongado o la depresión, promoviendo una recuperación emocional saludable y significativa.